Construida en 1896 para ser fábrica de hilados, al cabo de 11 años fue reformada por Lluís Muncunill para convertirse en la residencia familiar del industrial textil Josep Freixa. A partir de 1958 fue la sede principal del Conservatorio Municipal de Terrassa y desde principios del siglo XXI alberga la Oficina de Turismo de la Ciudad.

La singularidad estilística del edificio, originalmente en las afueras de la ciudad, radica en la utilización de la curva en muchas de sus posibilidades – arcos, bóvedas, tejado, ventanas escalera de caracol – dando un carácter de edificio vivo y en plena armonía con los jardines que le rodean, diseñados por el pintor paisajista Rafel Benet y de inspiración anglosajona. Los muros blancos contrastan con un tejado gris de textura muy especial: revestimiento de mortero con cristales incrustados, para alcanzar cierto brillo diurno e incluso nocturno.

Es este juego enriquecedor de texturas uno de los elementos que ha utilizado Jose Galeote, compositor barcelonés residente en Terrassa, para revestir también su música, que se mueve a ritmo de un sinuoso y elegante vals modernista, símbolo de la vida social burguesa de la familia Freixa.

Las melodías costumbristas, que dibujan tesituras de altura circular, a la manera de los arcos de la Masía, son tratadas con armonías y colores del siglo XXI, ofreciendo un bello diálogo entre pasado y presente. Y de paso, disfrutando de la belleza de la Masía Freixa, nos hace reflexionar sobre el futuro y cómo el paso del tiempo hace cambiar el significado del patrimonio artístico.